El 21 de marzo es el Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial.

El 21 de marzo de 1960, en Sudáfrica, en pleno apogeo del apartheid, la policía abrió fuego contra un grupo de manifestantes negros, matando a sesenta y nueve e hiriendo a ciento ochenta. Este hecho es tristemente recordado como la Masacre de Sharpeville.

En 1966, la Asamblea General subrayó la necesidad de un mayor compromiso con la eliminación de todas las formas de discriminación racial al proclamar este día como  internacional.

En 1979, se decidió que a partir del 21 de marzo de cada año, las comunidades dedicarían una semana a la solidaridad con los países que luchan contra el racismo y la discriminación racial.

El tema elegido para las celebraciones de 2018 fue: «Promover la tolerancia, la inclusión, la unidad y el respeto a la diversidad en la lucha contra la discriminación racial».

El proyecto «Construye hoy la solidaridad europea (BEST): Volvamos a jugar la carta de la fraternidad» se basa en estos temas. El objetivo general del proyecto «BEST» es ampliar las buenas prácticas en materia de educación inclusiva y de promoción de valores comunes, iniciadas en particular a nivel local, reproduciendo las buenas prácticas a mayor escala, transfiriéndolas a nuevos contextos y defendiéndolas a nivel europeo. El objetivo específico es mejorar la adquisición de competencias sociales y cívicas, fomentando el conocimiento, la comprensión y la apropiación de valores y fundamentos.

Se ha elegido el 21 de marzo como fecha para el intercambio de mensajes de solidaridad en toda Europa. Y este es el mensaje que queremos transmitir:

«No creo en la caridad. Creo en la solidaridad. La caridad es muy vertical. Va de arriba a abajo. La solidaridad es horizontal. Respeta a la otra persona. Tengo mucho que aprender de los demás». Esta frase la escribió Eduardo Galeano. Quería subrayar la diferencia entre Caridad y Solidaridad. La caridad es algo que se da a los que tienen «menos». Sugiere una creencia en un sistema vertical (jerárquico), un «nosotros» y un «ellos». Crea una dinámica de poder que refuerza aún más los sistemas de opresión y desigualdad económica.

La solidaridad adopta un enfoque de cambio de sistemas. Su filosofía básica es que todas las relaciones y dinámicas de poder son multidireccionales y reconoce que todo el mundo tiene sabiduría y recursos para resolver los problemas.

Hemos llevado a cabo un vídeo representa el núcleo del objetivo del proyecto, ya que muestra que, aunque hablemos idiomas diferentes, el mensaje que queremos comunicar sigue siendo el mismo. Es nuestra diversidad la que nos hace iguales y únicas.

Creemos que el 21 de marzo debe ser todos los días. Las lecciones que nos dan estos días deben ser el bien común para ponerlo en práctica todos los días.

Puedes acceder a la noticia original aquí

Translate »