Las palabras tienen el poder de acompañar, de consolar, de transmitir afecto o de infundir esperanza en aquellos que las reciben. Así lo han podido comprobar en el Hospital Ribera Povisa de Vigo, el centro al que el alumnado del instituto IESO Canal de Castilla (Villamuriel de Cerrato, Palencia) envió varias postales solidarias realizadas en el marco del programa SAY (‘La solidaridad: un asunto de jóvenes. La voz de la fraternidad’). “Son mucho más que papel: son puentes de conexión entre jóvenes comprometidos y personas que necesitan ánimo. Y eso, para nosotros, tiene un valor incalculable”, aseguran desde el departamento de Atención al Paciente, Comunicación y Enfermería.
Los y las profesionales de este hospital no dudaron en aceptar esta “propuesta preciosa y muy humana” que les hizo una profesora del instituto. El compromiso, tanto del personal sanitario como de los docentes, ha sido fundamental para desarrollar esta actividad del programa SAY, en el que ha participado juventud de hasta seis países europeos y que ha sido financiado por el programa Erasmus+.
Desde la Fundación Cives, hemos contactado con los trabajadores y trabajadoras de este centro sanitario para hablar del impacto de esta iniciativa: “Ver cómo la juventud se han implicado con tanta sensibilidad y conciencia social ha sido realmente inspirador”.
-¿Cómo se involucró el hospital en el proyecto?
El hospital se involucró en este proyecto gracias a la iniciativa de una profesora que se puso en contacto con nosotros. Ella conocía a uno de nuestros cirujanos pediátricos, quien había operado a su hijo unas cuantas veces, y a través de esa conexión nos propuso la idea de colaborar con su alumnado para llevar un poco de ánimo a nuestros pacientes. Nos pareció una propuesta preciosa y muy humana, y no dudamos en sumarnos.
-¿De qué manera las postales con mensajes solidarios pueden influir positivamente en los y las pacientes o en el personal del hospital?
Las postales con mensajes solidarios tienen un impacto muy positivo tanto en nuestros pacientes como en el personal del hospital.
Para los pacientes, especialmente en momentos de vulnerabilidad, recibir una postal con palabras de ánimo, esperanza y cariño puede ser un verdadero bálsamo emocional. Les recuerda que no están solos, que fuera del hospital hay personas –aunque no los conozcan personalmente– que se preocupan por su bienestar. Eso genera una sensación de acompañamiento y consuelo que puede ayudar a sobrellevar mejor la estancia hospitalaria.
Para el personal sanitario, estas iniciativas también son muy valiosas. Nos recuerdan la importancia de la dimensión humana de nuestro trabajo, nos motivan y nos emocionan. Ver la empatía y la sensibilidad que muestran los adolescentes en sus mensajes nos llena de esperanza y nos impulsa a seguir cuidando con el corazón. Es un gesto sencillo, pero con un impacto enorme.
-¿Qué valor tiene para el hospital recibir mensajes sobre temas como paz, igualdad de género, racismo, discriminación, desigualdad y salud mental?
Recibir mensajes que abordan temas tan profundos y necesarios como la paz, la igualdad de género, el racismo, la discriminación, la desigualdad o la salud mental tiene un enorme valor para nuestro hospital. Nos ayuda a recordar que la salud no es solo física, sino también emocional y social. Estos mensajes reflejan una conciencia social muy madura por parte del alumnado y aportan un mensaje de justicia, respeto y empatía que es fundamental en cualquier entorno, especialmente en un hospital.
– ¿Cómo se relacionan estos temas con la misión y los valores del hospital?
Los temas como la paz, la igualdad de género, la lucha contra el racismo y la discriminación, la reducción de la desigualdad y el cuidado de la salud mental están profundamente relacionados con la misión y los valores de nuestro hospital. Nuestra labor no se limita solo a curar enfermedades, sino también a cuidar a las personas en su integridad, promoviendo un entorno seguro, justo, respetuoso y empático para todos.
Como institución sanitaria, defendemos el derecho universal a la salud y trabajamos cada día para ofrecer una atención equitativa, sin distinciones de género, raza, orientación sexual o condición social. Además, damos una gran importancia a la salud mental como parte fundamental del bienestar de nuestros pacientes y de nuestro personal.
¿Ha habido alguna reacción significativa de los pacientes o del personal al recibir estas postales? ¿Cómo han recibido los pacientes o el personal del hospital estos mensajes solidarios?
Sí, ha habido reacciones muy emotivas tanto por parte de los pacientes como del personal. Muchos pacientes se han sorprendido gratamente al recibir una postal con un mensaje positivo y lleno de cariño de alguien que no conocen. Para algunos, ha sido un momento de emoción y alegría en medio de la rutina hospitalaria; incluso algunos han querido conservar la postal como un pequeño tesoro, o compartirla con sus familiares. Esos gestos les han dado un impulso anímico muy necesario.
Por parte del personal, también ha sido muy bien recibido. Ha generado un ambiente muy bonito en las plantas donde se repartieron las postales. Ver cómo los y las jóvenes se han implicado con tanta sensibilidad y conciencia social ha sido realmente inspirador. Nos ha recordado que el cuidado de la salud va más allá de los tratamientos: también se trata de gestos humanos que tocan el corazón. Sin duda, ha sido una experiencia muy enriquecedora y emotiva para todos.
¿Cómo se integran estos mensajes en las actividades diarias del hospital?
Estos mensajes solidarios se han integrado de manera muy natural en las actividades diarias del hospital.
En colaboración con el equipo de humanización hospitalaria, estos mensajes se utilizan en actividades terapéuticas y de animación, especialmente con niños y adolescentes hospitalizados, para fomentar la reflexión, el diálogo y la expresión emocional.
En definitiva, se han convertido en un recurso más dentro del hospital para promover el bienestar emocional, reforzar valores humanos esenciales y recordar que la empatía y la solidaridad también curan.
¿Cómo considera el hospital que los valores de la ciudadanía global reflejados en las postales puedan enriquecer la experiencia hospitalaria?
Desde el hospital consideramos que los valores de la ciudadanía global aportan una dimensión muy valiosa a la experiencia hospitalaria. Estos valores, reflejados en las postales que hemos recibido, contribuyen a crear un entorno más humano, más empático y más consciente del papel que todos y todas jugamos en el cuidado mutuo.
En un hospital, donde conviven personas de distintos orígenes, culturas y situaciones, promover estos mensajes fortalece la convivencia y el respeto. Además, ayuda a pacientes, familias y profesionales a sentirse parte de algo más grande: una comunidad que se apoya, que se preocupa y que lucha por un mundo más justo, incluso en medio de la enfermedad o la dificultad.
¿Existen planes para seguir colaborando con este proyecto u otros similares en el futuro? ¿El hospital tiene interés en continuar participando en iniciativas solidarias o de sensibilización en el futuro? ¿Hay alguna forma especial en la que las postales se utilicen o se exhiban dentro del hospital?
Sí, sin duda. Desde el hospital estamos muy interesados en seguir colaborando con este tipo de proyectos, tanto con este instituto como con otras iniciativas similares. Creemos firmemente en el valor de estas acciones solidarias y de sensibilización, no solo por el impacto positivo que tienen en nuestros pacientes, sino también porque enriquecen el entorno hospitalario y nos conectan con la comunidad de una forma muy humana y significativa.
Estas postales son mucho más que papel: son puentes de conexión entre jóvenes comprometidos y personas que necesitan ánimo. Y eso, para nosotros, tiene un valor incalculable.